
Inventado por el profesional de la restauración Walter Chell, en la localidad de canadiense de Calgary, Alberta, en el año 1969, el cóctel Bloody Caesar es muy consumido en el país que ocupa la zona más septentrional del continente americano.
El Boody Caesar, también llamado simplemente Caesar, se elabora básicamente con vodka, Clamato —una suerte de cóctel de tomate con almeja—, salsa brava y salsa Worcester o perrins. Es decir, es sin duda un cóctel para valientes de estómago y paladar a prueba de bombas.
Cóctel Bloody Caesar, receta y preparación
Para elaborar este combinado de finales de los 60, vamos a necesitar todos estos ingredientes:

- 180 ml de Clamato
- 30-45 ml de vodka
- 4 chorritos de salsa Worcester o perrins
- 2 chorritos de salsa barbacoa
- Apio
- Sal
- Pimienta
- 1 rodaja de limón
La elaboración del cóctel Bloody Caesar se elabora del siguiente modo. En primer lugar, servimos los 30 o 45 mililitros de vodka —os recomendamos el Absolut Peppar por sus adecuadas especialidades para este combinado—, los dos chorritos de salsa brava, tres pellizcos de sal y pimienta, cuatro chorritos de salsa Worcester o perrins y llenamos el resto con Clamato y mucho hielo. Podemos añadir también un chorrito de limón.
El combinado, lo serviremos en vasos alto, con hielo también, presentados con el borde lleno de una combinación de sal y pimienta y un tallo de apio en el interior del vaso. Muy parecido a lo que hacemos en un Bloody Mary. Finalmente, colocaremos una rodaja de limón en el filo. Con esto, nuestro cóctel Boody Caesar, nuestro cóctel picante, estará listo para tomar.
¡Buen trago!