
Quieres probar a cambiar tu vodka favorito por una de las demás opciones de vodkas premium que hay en el mercado, pensabas que te iba a gustar porque habías leído muy buenas críticas… pero no. ¿Qué haces con esa botella? ¿La regalas a tu peor enemigo?
Con este artículo queremos mostrare varias formas de mejorar el sabor, o por lo menos disfrazarlo un poco, para que puedas terminarte esa botella sin tener que pasar por un calvario.
Cómo mejorar el sabor del vodka
- Disfrázalo con otra bebida
Comenzamos por el más obvio, mezcla el vodka con tu fruta favorita (zumo de naranja, manzana, etc.) o tu bebida preferida que, aunque la calidad del combinado no sea la mejor, por lo menos cumplirá el propósito.
- Pásalo por un embudo
Utiliza un embudo para volcar el contenido de una botella en otra. De esta manera reducirás las impurezas que pueda tener ese vodka; lo haces dos o tres veces y luego lo dejas reposar durante unos minutos. Con esto acabas de conseguir que el vodka sepa diferente.
- El método del congelador
Es el más simple de todos, cuando quieras disimular el sabor, lo mejor que podrás hacer es enfriarla en el congelador. Nuestro paladar está programado para reducir el sabor de cosas frías aumentando esa sensación refrescante que te deja nada más tomarlo.
- Mézclala con carbón vegetal
El que mayor dedicación requiere y el que probablemente te dé mejores resultados. Consigue un poco de carbón vegetal, introdúcelo en la botella y déjala dentro de la nevera por la noche y sácala durante el día. Realiza este procedimiento durante una semana removiéndola un poco al sacarla de la nevera. Tras 7 días cuela el líquido en otra botella distinta.