El vodka, una de las bebidas destiladas más populares del mundo, suele elaborarse con granos u otro tipo de vegetal ricos en almidón como el trigo, la patata o el centeno; pero esto no siempre es así y las materias primas de algunos de ellos varía utilizando uvas, por ejemplo. Y no necesariamente un vodka deba ser peculiar por su materia prima, sino también por lo que se le añade, como ahora veremos…

Vodka de melaza de caña de azúcar: Cape To Rio Vodka
Como hemos comentado, lo normal es que un vodka esté elaborado a partir de trigo, centeno, patata o cebada, pero no son pocas las veces que nos encontramos ante vodkas como Cape To Rio, un vodka de origen sudafricano elaborado con melaza de caña de azúcar. Algo dulce seguro que es.
Vodka de uva: Ciroc Vodka
Ciroc Vodka es uno de esos ejemplos en que se demuestra que no es tan importante que la materia prima de un vodka sea la clásica y ya conocida. En esta ocasión, este vodka francés de clase Ultra Premium utiliza uva blanca, concretamente de las variedades Mauzac Blanc y Ugni Blanc.
Vodka de Cupacake: Cupcake Vodka
Si hablamos de vodkas destilados a la antigua usanza, hablamos de vodka destilados con granos. En este caso, Cupcake Vodka se obtiene mediante seis destilaciones de granos estadounidenses de distinto tipo. La particularidad de este vodka reside en el sabor que posee, ya que es infusionado con los conocidos cupcakes. Además, no sólo de un sabor concreto de cupcake.
En próximas entregas veremos cómo un vodka puede tener sabor a toffee, cómo se puede obtener mediante la destilación de quinoa del altiplano boliviano o cómo puede saber a auténtica panceta.